Cabos Sueltos surge en torno a una inquietud compartida de crear una entidad que pueda alojar y respaldar diferentes proyectos vinculados al ámbito social, donde consideramos que el psicoanálisis tiene mucho que aportar. Se trata de una transmisión dentro de una lógica que posibilite el diálogo y el intercambio enriquecedor con otras disciplinas, produciendo
efectos en lo social.

La fractura de los lazos sociales y las modificaciones de la familia tradicional -así como otras instituciones- dejan a los sujetos desprotegidos frente a una dinámica contemporánea cada vez más exigente y excluyente. Como psicoanalistas decidimos dar un paso más y asumir nuestro compromiso ético y social con la práctica clínica por la que apostamos, como con aquellas acciones destinadas a restituir el entramado social, dando sostén y apoyo tanto a las personas como a las instituciones (familias, escuelas…).

Nuestro propósito se precipita luego de muchos años de experiencia, en el encuentro o cruce entre profesionales dedicados a la práctica del psicoanálisis en espacios diversos. La práctica clínica que venimos sosteniendo cada uno de nosotros, tanto en el ámbito público como en el privado, nos permite captar las vulnerabilidades de aquellas personas que buscan un lugar donde poder alojarse y sujetarse, donde poder reorganizarse y salir a flote de distintas situaciones que producen grietas en sus vidas, generando no sólo malestar y sufrimiento, sino también diversos efectos sintomáticos tanto físicos como psíquicos. Asimismo, nos percatamos de las dificultades actuales que nos atraviesan y nos desafían a inventar nuevas formas de organización ante nuevas coyunturas inéditas. Lo que nos orienta como psicoanalistas es acoger a cada sujeto en su singularidad.